sábado, 19 de septiembre de 2009

Máquina electrostática de Van der Graaf

Esta máquina fue ideada por Lord Kelvin y fue conocida inicialmente como "Máquina electrostática de Cinta Sinfín". Posteriormente, fue perfeccionada por Van de Graaff. Es una máquina de laboratorio con fines educativos. Está formada por una campana de metal que es un conductor esférico hueco, un soporte de material aislante (PVC), un soporte metálico colocado sobre el soporte aislante que acoge a la campana, dos polines; uno superior de material aislante (PVC) y otro inferior de metal, un motor que acciona el polin metálico inferior, una faja de caucho natural que conecta los polines, dos peinetas de cobre colocadas una en la parte superior junto al polín de PVC y otro junto al polín metálico, una base metálica donde está instalado el motor y el polín de metal y un terminal en forma de varilla que va conectado a un conductor eléctrico que tiene dos derivaciones: uno va a tierra y el otro conectado a la base metálica.
Mediante el motor eléctrico se da movimiento a la faja de caucho. En la parte inferior el peine de púas permite que la faja se cargue en forma negativa. La faja en movimiento lleva estas cargas hacia la parte superior donde entrega al siguiente peine que a su vez lo entrega a la campana para su almacenamiento. El transporte y almacenamiento de carga son constantes, incrementando el potencial eléctrico de la campana en forma considerada, obteniendo rayos en miniatura de 60 cms. a 100 cms de longitud, lo que indica una tensión eléctrica de hasta un millón de voltios, con un bajísimo amperaje. Podemos hacer la experiencia utilizando la varilla metálica, cogiéndola con la mano y acercando la esfera de este terminal a la campana de la máquina, así produciremos chispas de cualquier longitud que no hacen daño al operador, puesto que la corriente eléctrica circula a tierra sin tocar para nada el cuerpo humano. La máquina de Van de Graff, al igual que las demás máquinas electrostáticas, demuestra cómo se obtiene la electricidad a partir del frotamiento o fricción y la presencia del campo eléctrico, cuya acción es la atracción que ejerce sobre determinados cuerpos livianos. Se puede visualizar además el rayo eléctrico y sentir el efecto de la descarga.
El Museo de la Electricidad cuenta con una máquina de Van der Graaf en la sala "impacto de la Electricidad en la vida cotidiana" y puede ser accionada por todos los visitantes.

Colaboración: Ingeniero Alejandro Vega Alcázar.

Para mayor información de como construir una Van der Graaf, colgamos aqui un video instructivo. fuente: www.youtube.com

El tranvía Eléctrico del Museo; símbolo de la revaloración del Patrimonio Industrial en el Perú

El tranvía de Barranco ha cumplido 11 años desde su puesta en valor sobre los añejos rieles de la alameda Pedro de Osma. En 1997 se hizo realidad este proyecto denominado "El Vagón del Recuerdo", cumpliéndose de esta manera un caro anhelo del Museo de la Electricidad.
Su rehabilitación fue posible gracias al invalorable apoyo de la desaparecida empresa Electrolima S.A. y el esfuerzo de un grupo de profesionales que intervinieron en su detallada restauración. El viejo vagón fue ubicado en un cementerio de tranvías en la localidad de Manchay, camino a Cieneguilla, en la afueras de la ciudad de Lima, y desde ese momento pasó por varios lugares antes de llegar a su ubicación final.

Los trabajos de restauración se iniciaron en un local adyacente a la central hidroeléctrica de Moyopampa, en Chosica, después fue trasladado hasta el distrito de Ventanilla para continuar con los trabajos de carpintería metálica, y finalmente fue llevado a las instalaciones del SENATI en el distrito de Los Olivos, donde se concluyó la obra mecánico-eléctrica, la carrocería y los acabados.
Los objetivos de esta obra están enmarcados dentro de un amplio proyecto de revaloración del patrimonio industrial eléctrico, ya que los tranvías eléctricos de Lima estuvieron por varias décadas administrados por las Empresas Eléctricas Asociadas (EE.EE.AA.), así como en otros conceptos tales como la recuperación de valores tradicionales (la urbanidad y la educación cívica, entre otros), el aprovechamiento de la electricidad como un recurso limpio, no contaminante, y que va acorde con las nuevas tendencias de desarrollo sostenible y ahorro de energía.



En todos estos años el tranvía ha paseado a cientos de miles de usuarios, especialmente público escolar, quienes se informan de esta manera que Lima tuvo en el pasado este tipo de transporte, y aprecian además el minucioso trabajo de restauración de un testimonio histórico cultural de esta magnitud.

Aqui otro video del tranvía, esta vez realizando su recorrido desde el Museo de la Electricidad hasta el Museo de Arte Colonial Pedro de Osma. El antiguo "urbanito" marca Breda, de fabricación italiana, recorre las cinco cuadras de la avenida Pedro de Osma a una velocidad de 6 kms/h. El señor Donato Martínez, antiguo operario de Enafer, es ahora el experto motorista que se encarga de conducir el tranvia y pasear a los visitantes por esta entretenido, evocador y agitado viaje.



Tomado del blog: Patrimonio Industrial en el Perú: http://patrimonioindustrialperu.blogspot.com